Ahora es un buen momento para comprar un coche nuevo. Según ANFAC (Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones) los coches que se venden en la actualidad ofrecen el doble de equipamiento que hace cinco años, y están a un precio medio similar al de finales de 2008. Sólo hay que acercarse a un concesionario para comprobarlo.
Pero la realidad no invita al optimismo. Los concesionarios reciben pocas visitas, las ofertas no acaban de estimular la compra de un coche nuevo y las matriculaciones no despegan. Llevamos ya tres años consecutivos con matriculaciones por debajo del millón de unidades, y muy probablemente este 2012 no se superen los 800.000 coches vendidos. Nada más y nada menos que la mitad de los coches que se matriculaban anualmente en los mejores años de bonanza económica, entre el 2004 y el 2007.
Los dos primeros meses de este 2012 indican que la tendencia negativa continúa. Según un estudio de Coches.net, las ventas de coche nuevo bajarán en febrero un 13,78%. Así, difícilmente superaremos las 800.000 unidades matriculadas a finales de año.
Otro indicador confirma la tendencia. Por primera vez las ventas a particulares descienden por debajo de las ventas a flotas. Es decir, las empresas compran más coches que las familias, un claro reflejo de los estragos que está haciendo la crisis en la clase media española. Hay que tener en cuenta que un coche puede aguantar perfectamente más de diez años sin necesidad de ser renovado. Y eso es lo que está haciendo el españolito medio: aprovechar el margen que da la enorme calidad de construcción de los coches actuales, para aguantar el coche hasta que vengan tiempos mejores, o simplemente, que se despeje la actual incertidumbre económica.
Todo este conjunto de datos negativos debe llevar a una reflexión. Por un lado, está muy claro que los 1,6 millones de coches matriculados es una cifra que no se va a volver a repetir en muchos años, si realmente se vuelve a alcanzar. Según ANIACAM (Asociación Nacional de Importadores de Automóviles, Camiones, Autobuses y Motocicletas) la dimensión del mercado español se sitúa en torno a los 1,2 millones de turismos y todoterrenos. En el mejor de los casos, diría yo, porque es posible que sea incluso inferior.
Por otro lado, debemos hacer frente a esta realidad, y el sector necesita reestructurarse, por muy doloroso que sea. Algunas empresas ya lo están haciendo, otras lo hacen forzadas y algunas llegan demasiado tarde. Como muchos otros sectores, el del automóvil debe adaptarse a los nuevos tiempos, y hacerlo lo antes posible. Sólo de esta manera se podrá estar preparado para cuando toque crecer, que llegará.
Sería interesante que las marcas incrementaran la oferta de coches más baratos, por debajo de los 10.000 euros, en creciente demanda. Los modelos que se mueven en torno a esa cifra son todavía pocos en relación al número de versiones que se ofertan. Quizás el incremento de la oferta de coches más asequibles, adaptados a los tiempos que corren, complementado con un plan de achatarramiento o cualquier otro plan de estímulo a la compra, podría ayudar a invertir esta tendencia negativa.
Finalmente, sólo queda tener paciencia. Se dice que en economía, las cosas suceden más rápido de lo que uno espera. Y muy probablemente, cuando la incertidumbre de paso a una mayor confianza, mucha gente necesite renovar su coche. Porque hay que tener en cuenta que el parque se está envejeciendo a pasos agigantados. El 37% de los coches que circulan por nuestras carreteras hoy en día superan los diez años.
Esta renovación del parque estamos seguros que vendrá, ya sea por capricho del propietario, o bien por puro análisis contable. Y es que un coche nuevo, en buenas condiciones, suele ser más rentable que uno viejo, en todos los sentidos. Así que aferrémonos a ello y seamos en lo posible positivos.
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